El paisaje de la Garrotxa de Empordà tiene dos fisonomías. Por un lado, encontramos los paisajes agrícolas de secano con interesantes márgenes arbolados y, por otro, los vertientes donde el abandono agrícola ha hecho aumentar los bosques. En este segundo espacio cada vez es más común encontrar los masos abandonados y totalmente rodeados de bosques. Básicamente pinares secundarios de pino blanco, matorrales y praderas.
Recientemente este espacio también se ha caracterizado por la presencia de numerosas granjas, algunas de las cuales son de gran dimensión.
42.254775, 2.797432
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